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viernes, 4 de diciembre de 2020

Libres de la Ira Venidera (de la Gran Tribulación)

Libres de la Ira Venidera (de la Gran Tribulación)

En las Epístolas a los Tesalonicenses Pablo nos habla mucho de las doctrinas escatológicas. Podemos encontras las características de la gente de ese tiempo, de la inminencia de la segunda venida de Cristo, del Arrebatamiento de la iglesia, de la Gran Tribulación, del Anticristo, y lo que vamos a ver ahora, de la promesa que la iglesia no pasaría por la Gran Tribulación.

1 Tesalonicenses 1:10 Biblia Expandida
10 y esperar confiadamente la venida de Su Hijo de los cielos, al cual resucitó de entre los muertos, es decir, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.

Cuando hablaba con los preterista este pasaje ellos me decían que era un hecho que la ira venidera se refería al 70 DC porque la iglesia de Tesalónica era una iglesia judía y Dios los iba a librar de los horrores de la "Gran Tribulación" que ocurriría con la destrucción de Jerusalén y de su Templo.

Primero quiero mostrar que ese pasaje muestra dos cosas, la inminencia de la venida de Jesús, y la liberación de los creyentes de la Gran Tribulación.

Dice que debemos esperar la venida de Jesús del cielo; no de un acontecimiento en la tierra como el que ocurrió en 70 DC, sino que nuestros ojos deben estar puestos en Jesús. Pablo no dice: "Esperen que el templo de Jerusalén sea destruido y sabrán que Jesús viene".

No, debían esperar a Jesús de los cielos.

En Hechos 1 vemos algo interesante:

Hechos 1:9-11
9 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos.
10 Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas,
11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.

Ellos vieron a Jesús con sus ojos físicos irse al cielo entre las nubes, y de la misma manera volverá.

Lo segundo que él nos dice es que Jesús nos libra de la ira venidera; y él está hablando de la Gran Tribulación.

Es ilógico pensar que es iba a librar porque estaban en otro lugar. Era evidente que estaban en Tesalónica y no en Jerusalén. Y además no tenían que estar en Jerusalén porque eran gentiles y no judíos.

Veamos un momento el libro de Apocalipsis:

Apocalipsis 3:10
10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.

Este es otra promesa de que los creyentes serían librados de la Gran Tribulación.

A los largo de la Biblia podemos ver que Dios ha librado a los suyos de momentos de gran destrucción; Jesús dijo que eso pasó con Noé en el diluvio y con Lot en la destrucción de Sodoma y Gomorra (Lucas 17:26-30).

Asi como fue en el pasado, así será en el futuro, Dios librará a los creyentes de la Gran Tribulación.

Pero un preterista me dirá: "Ricardo, eso no es cierto porque la iglesia era judía, y Pablo le hablaba alos judíos. 

Nada más lejos de la verdad; vayamos mas adelante al 2:14 para demostrar que la iglesia de Tesalónica era gentil.

1 Tesalonicenses 2:14 (Biblia Expandida)
14 Porque ustedes, hermanos, (siguieron el ejemplo y) llegaron a ser imitadores de las iglesias de Dios en Cristo Jesús que están en Judea, porque también ustedes padecieron los mismos sufrimientos y persecuciones a manos de sus propios compatriotas, tal como ellos padecieron a manos de los Judíos.

Evidentemente Tesalónica era una iglesia gentil, y dice que habían sufrido los mismos sufrimientos que los cristianos judíos, por mano de sus compatriotas.

Si no eran judíos, y no estaban en Jerusalén, es totalmente ilógico pensar que iban a ser librados de los acontecimientos que iban a pasar en Jerusalén unos años después. 

Entonces vemos que la protección de la ira venidera no tiene que ver con lo que le pasó a los judíos en 70 DC; sino que nos habla de otro acontecimiento futuro, que en otras partes de la Biblia lo llama "La Gran Tribulación".



viernes, 2 de marzo de 2018

Por qué los Cristianos No Guardamos el Sábado Como Día de Reposo

Por qué los Cristianos No Guardamos el Sábado Como Día de Reposo



Los mesiánicos y adventistas nos tratan de vender la idea de que los creyentes debemos guardar el sábado como día de reposo; inclusive los adventistas dicen que el guardar el sábado es el sello del Espíritu Santo y el domingo es la marca de la bestia.

Pero, ¿que nos dice la Biblia?

En este estudio veremos los motivos del terrible error doctrinal de pretender que los creyentes guarden el sábado como día de reposo.


Colosenses 2:16-17
16 Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,
17 todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.

En este pasaje, Pablo explícitamente se refiere al sábado como una sombra de Cristo, lo cual es ya no es obligatorio puesto que la sustancia (Cristo) ha venido. 

En esos versos que el día de reposo semanal está incluido, con la frase “o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo” refiriéndose a los días santos anuales, mensuales, y semanales del calendario judío (1 Crónicas 23:31; 2 Crónicas 2:4; 31:3; Ezequiel 45:17; Oseas 2:11).

10 razones en el Nuevo Testamento para no guardar el sábado como día de reposo:

  1. El día de reposo era la señal para Israel del Pacto Mosaico (Exodo 31:16-17; Ezequiel 20:12; Nehemías 9:14). 
  2. Como ahora estamos bajo el Nuevo Pacto (Hebreos 8:7-13), ya no estamos obligados a observar la señal del Pacto Mosaico.
  3. El Nuevo Testamento nunca ordena a los cristianos que observen el día de reposo. Por otra parte, cada uno de los otros nueve mandamientos son reiterados en el Nuevo Testamento.
  4. En nuestro único destello de un servicio de adoración de la iglesia temprana en el Nuevo Testamento, la iglesia se reunía en el primer día de la semana (Hechos 20:7).
  5. En ninguna parte del Antiguo Testamento se les ordena a las naciones Gentiles a observar el día de reposo o se les condena para no guardarlo. Esto es extraño si la observancia del día de reposo se pretendiera que fuese un principio moral eterno.
  6. No hay evidencia en la Biblia de alguien guardando el día de reposo antes del tiempo de Moisés, ni hay algún mandato en la Biblia de guardar el sábado antes de que se diera la ley en el Monte Sinaí.
  7. Cuando los Apóstoles se reunieron en el concilio de Jerusalén (Hechos 15), no impusieron guardar el día de reposo en los creyentes gentiles.
  8. El apóstol Pablo advirtió a los gentiles sobre muchos pecados diferentes en sus epístolas, pero quebrantar el día de reposo no está nunca incluido entre ellos.
  9. En Gálatas 4:10-11, Pablo reprende a los Gálatas por pensar que Dios esperaba que ellos observara los días especiales (incluyendo el día de reposo).
  10. En Romanos 14:5, Pablo prohíbe a aquellos que observaban el día de reposo (éstos sin duda eran creyentes judíos) por condenar a aquellos que no lo guardaban (creyentes gentiles).

El día de reposo y la iglesia primitiva

Los padres de la iglesia primitiva, desde Ignacio hasta Augustín, enseñaron que el día de reposo del Antiguo Testamento había estado abolido y que el primer día de la semana (domingo) era el día cuando los cristianos deberían reunirse para adorar (contrario a las afirmaciones de muchos séptimo sabatistas del séptimo día que afirman que el culto dominical no fue instituido hasta el siglo cuarto).

El domingo no ha reemplazado sábado como el día de reposo. Más bien el Día del Señor es un tiempo cuando los creyentes se reúnen para conmemorar Su resurrección, lo cual ocurrió en el primer día de la semana. Todos los días para el creyente es un día de reposo, puesto que ha cesado nuestra labor espiritual y estamos descansando en la salvación del Señor (Hebreos 4:9-11).

Así es que mientras todavía seguimos el patrón de designar un día de la semana un día en que el pueblo del Señor se reúne en adoración, no nos referimos a ello como “el día de reposo”.


Adaptado del blog evangelio.wordpress.com

jueves, 15 de febrero de 2018

La Cábala

Leyendo que algunos cristianos consideran a la cábala como un movimiento válido para la interpretación bíblica (nada más lejos de la verdad), aquí les dejo lo que consiste este grupo judío.


La Cábala

La cábala (del hebreo קַבָּלָה‎ qabbalah, ‘recibir’) es una disciplina y escuela de pensamiento esotérico relacionada con el judaísmo. Utiliza varios métodos más o menos arbitrarios para analizar sentidos recónditos de la Torá (texto sagrado de los judíos, al que los cristianos denominan Pentateuco, y que representa los primeros cinco libros de la Biblia).

En la antigua literatura judaica, la cábala era el cuerpo total de la doctrina recibida, con excepción del Pentateuco. Así pues, incluía a los poetas y los hagiógrafos de las tradiciones orales, incorporadas posteriormente al texto de la Mishná.

Sus textos principales son el Árbol de la Vida, el Talmud de las 10 sefirot, el Zohar, el prefacio de la Sabiduría de la cabalá.

Orígenes


La cábala surgió hacia finales del siglo XII, en el sur de Francia y España. Durante el renacimiento místico judío en la Palestina otomana.

La cábala sale a la luz como tal entre los siglos XII y XIII en la Provenza y Cataluña a través de las comunidades judías de la zona vinculadas indefectiblemente a Oriente Próximo. Así, podemos decir que la cábala nace en Sefarad, la comunidad judía española.

Una importante contribución a la cábala se la debemos a Abraham Abulafia (nacido en Zaragoza en 1240). Una de las fuentes más importantes de la cábala es el Zóhar (‘libro del esplendor’), escrito por Simeón Ben Yojai. La idea básica allí expuesta es que, del seno mismo de la Divinidad Oculta o Infinito (el Ain Sof), surgió un rayo de luz que dio origen a la nada (ain), identificada con una esfera (sefirá) o región, que recibe el nombre de kéter (‘corona’). A partir de esta corona suprema de Dios emanan otras nueve esferas (las sefirot). Estas diez esferas constituyen los distintos aspectos de Dios mediante los cuales este se automanifiesta.

Según el escritor italiano Pico della Mirándola (1463-1494), el filósofo cabalístico alemán Johannes Reuchlin (1455-1522) y el matemático alemán Wilhelm Schickard (1592-1635), la cábala era una sabiduría ancestral anterior a todas las religiones, que el dios Yahvé había revelado primero a Adán (el primer hombre, según la mitología hebrea), después a Abraham y luego a Moisés en el monte Sinaí, al tiempo que le hacía entrega de las Tablas de la Ley, un suceso que los judíos creían real, y situaban alrededor del siglo XIII A.C.

También se pretende que Dios enseñó sus verdades y misterios a través del ángel Raziel tras la caída de Adán.

Explicación de la cábala.

La cábala como tal es el pozo de todas las tradiciones místicas judías que se fueron acumulando desde antes de Cristo y que llegaron a reinterpretar las Escrituras de tantas y tan variadas maneras que llegaron a crear una mística cercana al gnosticismo o al jasidismo.

En esencia, la cábala (palabra que significa ‘recibir’) es un sistema de interpretación mística y alegórica de la Torá (que los cristianos llaman Pentateuco, y representa los primeros cinco libros de la Biblia cristiana), que busca en ese texto el significado del mundo y la «verdad». Pretende interpretar los sentidos ocultos de los cinco libros y en ellos busca la revelación. Puede entenderse de una manera metafísica, buscando la iluminación, o se puede entender como un medio a través del cual llegar a conocer la realidad que nos rodea. Cabalística es la afirmación de que «el conocimiento absoluto no tiene objeto sino que es un medio». Para los cabalistas, el lenguaje es creador y la Torá contiene todos los textos, todas las combinaciones que pueden darse para crear otros mundos y otras realidades. Los cabalistas entienden que el nombre de Dios está formado por todas las letras que componen el alfabeto y que este, por tanto, tiene múltiples formas. Dios se sirvió de las letras para crear el universo a través de sus emanaciones o sefirot.

De todas formas hay quien dice que existe una cábala cristiana, a lo que otros responden diciendo que lo más cercano al misticismo judío de la cábala es el catarismo.

Sin embargo mi opinión es que no tiene nada que ver con el cristianismo sino que es gnosticismo puro.

viernes, 11 de diciembre de 2015

¿El Judaísmo entra al Movimiento Ecuménico Católico?

Esta noticia se muestra como algo bueno, pero en realidad parece que los judíos están entrando en un ecumenismo con la Iglesia Católica Romana.

Veamos los siguientes acontecimientos.

Los rabinos ortodoxos reconocen por primera vez al cristianismo como parte del plan de Dios


El histórico documento ha recogido en sólo una semana la firma de más de dos mil rabinos ortodoxos





(ABC.es). Por primera vez al cabo de dos mil años de hostilidad, los rabinos ortodoxos reconocen teológicamente que el cristianismo es parte del plan de Dios para la humanidad ya que «Dios emplea muchos mensajeros para revelar su verdad».

El histórico documento, redactado por 25 destacados rabinos ortodoxos de Israel, Estados Unidos y Europa, ha recogido en sólo una semana la firma de más de dos mil rabinos ortodoxos, según manifestó el jueves en el Vaticano el rabino David Rosen, director de Asuntos Interreligiosos del American Jewish Committe (AJC).

El breve documento, que lleva por título «Hacer la voluntad de nuestro Padre en el cielo: hacia una asociación entre judíos y cristianos», cita autores clásicos como Maimónides o Yehudah Halevi, para los cuales «al separar el judaísmo y el cristianismo, Dios quería una separación entre socios, no una separación entre enemigos».

Los rabinos ortodoxos afirman que «ambos, judíos y cristianos, tiene una misión común, basada en la Alianza, para perfeccionar el mundo bajo la soberanía del Todopoderoso. Ninguno de nosotros puede llevar a cabo la misión de Dios en este mundo por separado».

El texto deja muy claro que «nuestra asociación no minimiza de ninguna manera las diferencias entre las dos comunidades y las dos religiones. Creemos que Dios emplea muchos mensajeros para revelar su verdad».

Subraya también, que ambas comunidades comparten la Revelación de la Biblia judía y concluye presentando un programa común: «Imitando a Dios, judíos y cristianos deben ofrecer modelos de servicio, amor incondicional y santidad. Hemos sido creados a imagen de Dios. Judíos y cristianos seguimos dedicados a la Alianza jugando un papel activo juntos para redimir el mundo».

En una conferencia de prensa conjunta con el cardenal suizo Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos, dentro del cual se inserta la Comisión para las Relaciones Religiosas con el Judaísmo, el Rabino Rosen destacó la importancia de que esta iniciativa haya partido de rabinos ortodoxos, y esté siendo aceptada con gran rapidez entre ellos, «porque el gran desafío es que se sumen los ortodoxos».

Efectivamente, muchos rabinos del judaísmo liberal miran ya con aprecio a los cristianos, pero el eje doctrinal del judaísmo rabínico, la única corriente después de la destrucción del Templo de Jerusalén, son precisamente los ortodoxos.

Rosen quitó importancia al desinterés de los judíos jasídicos, que son pocos y «viven en aislamiento» respecto al resto de la comunidad judía, pero consideró positivo que el documento «haya sido criticado por el ala de la extrema derecha dentro de la ortodoxia». Significa que están en el centro.

El nuevo documento, de carácter teológico, es un gran paso respecto al «Dabru Emet» del año 2000, que hacía notar la gran cantidad de puntos comunes y declaraba que el nazismo no era cristiano sino anticristiano.

En la misma conferencia de prensa, el cardenal Kurt Koch presentó el documento de la Comisión para las Relaciones Religiosas con el Judaísmo «Los dones y la llamada de Dios son irrevocables», elaborado con motivo del 50 aniversario de la declaración “Nostra Aetate» del Concilio Vaticano II que reconoció por primera vez los valores del judaísmo y del Islam, y los numerosos puntos comunes ente los creyentes en el Dios Único.

El nuevo documento del Vaticano, aprobado por la Congregación para la Doctrina de la Fe, toma su título de una afirmación de san Pablo en su carta a los Romanos sobre el valor eterno de la Alianza, y resume los grandes pasos en el camino hacia la amistad.

Juan Pablo II fue el primer Papa que visitó una sinagoga y llamó a los judíos «hermanos mayores». Benedicto XVI repitió el gesto y les llamó «nuestros padres en la fe». El Papa Francisco es todavía más positivo en varios pasajes de la exhortación apostólica «La alegría del Evangelio», el gran programa de su pontificado, y visitará la sinagoga de Roma el próximo 17 de enero.

El documento recuerda que, al margen de la hostilidad externa de las sinagogas oficiales contra los primeros cristianos, la Iglesia primitiva estuvo formada por cristianos judíos y cristianos gentiles, cada uno con sus costumbres, durante los primeros tres siglos.

Recuerda también la condena a Marción, por haber afirmado en el siglo II que las Escrituras del Nuevo Testamento reemplazaban y anulaban las del Antiguo. Aun así, durante muchos siglos, la actitud de la Iglesia hacia los judíos estuvo marcada por el desprecio y la hostilidad hasta el Concilio Vaticano II.

El proceso de reencuentro histórico se aceleró cuando Juan Pablo afirmó que la Alianza de Dios con el pueblo judío sigue en vigor, y debe ser respetada.

El documento confirma, como ya indicó Benedicto XVI, que «la Iglesia católica no desarrolla ni sostiene ninguna misión institucional especifica dirigida a los judíos».

Eso no excluye, naturalmente, igual que ante personas de cualquier otra religión, «los cristianos están llamados a dar testimonio de su fe en Jesucristo también a los judíos, aunque deben hacerlo de modo humilde y cuidadoso, reconociendo que los judíos son también portadores de la Palabra de Dios, y teniendo en cuenta especialmente la gran tragedia de la Shoah».

sábado, 10 de enero de 2015

Ecumenismo: Católicos y Mormones se acercan

El ecumenismo sigue avanzando más rápidamente de lo que pensábamos, hace unos meses Tony Palmer, Kenneth Copeland y una serie de líderes carismáticos destacados, más recientemente Rick Warren, varios rabinos judíos, y ahora los mormones.

Ecumenismo: Católicos y Mormones se acercan


En estos días podemos ver el avance que en materia ecuménica del actual Papa Francisco. El famoso diálogo ecuménico está alcanzando niveles nunca antes vistos en Roma 

En este tiempo vemos que no solo se le han acercado líderes cristianos, sino también las comunidades judías, y la iglesia Ortodoxa. Y finalmente una reconocida secta se ha sumado, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Más comúnmente conocidos como mormones.

En su propia página web (saladeprensamormona.org), ellos publicaron el mismo día de la elección de Francisco:
SALT LAKE CITY, UTAH, USA
“La Primera Presidencia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días entregó el siguiente comunicado hoy miércoles:

A nombre del liderazgo y de los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, extendemos nuestros más cordiales saludos a Su Santidad el Papa Francisco y oramos para que sienta la paz del Señor al servir como pontífice de la Iglesia Católica.
Nos honra y nos alegra la manera en que nuestras dos fes han trabajado juntas en asuntos de fe, moralidad y servicio al pobre y al necesitado. Valoramos la relación que se ha formado en estos esfuerzos conjuntos y estamos agradecidos por el bien que se ha logrado.
Esperamos seguir trabajando de manera conjunta, como el Apóstol Pablo escribió, en todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre (Filipenses 4:8)” 

Esto tan solo fue el principio del acercamiento entre los mormones y la iglesia católica.

Mas recientemente, en Noviembre del 2014, ocurrió esto en el Vaticano, como dice la página Zona Mormón:
En el marco de la apertura del coloquio internacional sobre el matrimonio organizado por el Vaticano, el Papa Francisco se reunión con más de 350 líderes religiosos, académicos y líderes de opinión, entre ellos el presidente Henry B. Eyring como representante de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días quien presentará un mensaje en este evento el martes 18.
Élder Eyring estuvo sentado en la primera fila de la sala del coloquio. De pronto el Papa al terminar su mensaje, se dirigió espontáneamente a saludar a cada representante invitado. Fue ahí que llegó hasta al líder mormón, saludándolo calurosamente, y marcando de esta manera, la primera reunión entre una autoridad general de la Iglesia y un Papa en el Vaticano.
Lo más grave no solo es el saludo con el Papa sino el hecho de que el líder mormón haya sido un expositor en este evento, que contó con varios líderes cristianos y judíos como sigue diciendo esta página:
Al final de su discurso de 20 minutos, el Papa entró en la audiencia y saludó personalmente a muchos de los presentadores de la conferencia, incluyendo el rabino Jonathan Sacks, el ex Gran Rabino del Reino Unido; Arzobispo Nicholas Okoh de la Iglesia Anglicana de Nigeria; Rev. Richard Warren de la Iglesia Saddleback en California; y Cyrille Seke e Yevette Padonou, fundadores y directores de La Puissance de L’Amour, o el amor de alimentación, una organización que promueve una sociedad más humana a través de matrimonios fuertes en el África occidental.
Vemos el avance del ecumenismo, ya no solo con iglesias cristianas, como la de Rick Warren, sino con sectas como los mormones y otras religiones como los judíos.

Vivimos en tiempos peligrosos.


Cerca a la Medianoche


viernes, 8 de agosto de 2014

El Papa que colaboró con Hitler

 El Papa que colaboró con Hitler 



En los Estados Unidos acaba de aparecer El Papa de Hitler: la historia secreta de Pio XII, un libro donde el investigador John Cornwell habla del antisemitismo y el silencio ante el Holocausto de un Papa al que el Vaticano está a punto de canonizar.   

(Por John Cornwell)

Siempre estuve convencido de que la evidente santidad de Eugenio Pacelli era una prueba de su buena fe. ¿Cómo prodría haber traicionado a los judios un Papa tan Santo?. Pedí acceso a documentos cruciales, asegurándoles a sus custodios que estaba del lado de mi investigado: en un libro titulado Un ladrón en la Noche, yo había defendido al Vaticano contra cargos del asesinato del Papa Juan Pablo I por sus pares.

Dos oficiales me permitieron acceder al material secreto: declaraciones bajo juramento que se juntaron hace treinta años para avalar el proceso de canonización de Pacelli y el archivo de la Secretaría de Estado del Vaticano. También recurrí a fuentes alemanas en relación con las actividades de Pacelli en Alemania durante las décadas del ´20 y del ´30, incluídos sus contactos con Adolf Hitler.

A mediados de 1997 me encontré en un estado de shock moral. El material que había juntado no apuntaba a una exoneración sino a una acusación aún más escandalosa.

La evidencia era explosiva, Mostraba por primera vez que Pacelli era abiertamente, y según sus propias palabras, antisemita.

Pacelli llegó al Vaticano en 1901, a la edad de 24 años, reclutado para especializarse en cuestiones internacionales y derecho canónico. Colaboró con su superior, Pietro Gasparri, en la reformulación del Código de Derecho Canónico que se distribuyó en 1917 a los obispos católicos de todo el mundo.

A la edad de 41 años, ya arzobispo, Pacelli partió hacia Munich como nuncio papal para comenzar el proceso de eliminar los desafíos legales a la nueva autocracia papal y procurar un tratado entre el papado y Alemania como un todo, que reemplazará todos los arreglos locales y se convirtiera en un modelo de las relaciones entre la Iglesia Católica y los Estados.

En mayo de 1917 recorrió Alemania, destruída por la guerra, ofreciéndo su caridad a gente de todas las religiones. Sin embargo, en una carta al Vaticano, reveló tener menos amor por los judíos. El 4 de septiembre le informó a Gasparri, que era cardenal secretario de estado en el Vaticano, que un doctor Werner, el rabino jefe de Munich, se había acercado a la nunciatura para rogar un favor. Con el fin de celebrar Succoth, los judíos necesitaban hojas de palmeras, que normalmente llegaban de Italia. Pero el gobierno italiano había prohibido la exportación, vía Suiza, de unas palmeras que los judíos habían comprado y que estaban retenidas en Como. “La comunidad israelita – continuaba Pacelli – busca la intervención del Papa con la esperanza de que abogue a favor de los miles de judíos alemanes”.

Pacelli le dijo a Gasparri que no le parecía apropiado que el Vaticano “los ayudara en la práctica de su culto judío”. Gasparri respondió que confiaba completamente en la “astucia” de Pacelli, coincidiendo con que no sería apropiado ayudar al rabino Werner.

Dieciocho meses mas tarde reveló su antipatía por los judíos de una manera más abiertamente antisemita, cuando estuvo en el centro de una revuelta bolchevique en Munich. En una carta a Gasparri, Pacelli describió a los revolucionarios y a su líder, Eugenio Levien: “Un ejército de trabajadores corría de un lado a otro, dándo órdenes, y en el medio, una pandilla de mujeres jóvenes, de dudosa apariencia, judías como todos los demás”, daba vueltas por las salas con sonrisas provocativas, degradantes y sugestivas.

La jefa de esa pandilla de mujeres era la amante de Levien, una jóven mujer rusa, judía y divorciada. (…..) Este Levien es un hombre jóven, de unos 30 o 35 años, también ruso y judío. Pálido sucio, con ojos vacíos, voz ronca, vulgar repulsivo, con una cara a la vez inteligente y taimada”.

Hitler que había logrado su primer gran triunfo en las elecciones de 1930, quería un trato con el Vaticano porque estaba convencido de que su movimiento sólo podía tener éxito si se eliminaba al catolicismo político y sus redes democráticas. Luego de su ascenso al poder en enero de 1933, Hitler hizo una prioridad de su negociación con Pacelli.

El Concordato del reich le garantizó a Pacelli el derecho a imponer un nuevo Código de Leyes Canónicas sobre los católicos de Alemania. A cambio, Pacelli colaboró en el retiro de los católicos de la actividad política y social. Luego Hitler insistió en la disolución “voluntaria” del Partido Central Católico Alemán”.

Los judios fueron las primeras víctimas del Concordato: luego de su firma , el 14 de julio de 1933, Hitler dijo a su gabinete que el tratado había creado una atmósfera de confianza “especialmente significativa en la lucha urgente contra el judaísmo internacional”. Aseguraba que la Iglesia Católica le había dado su bendición pública, en el país y afuera, al nacional – socialismo, incluída su posición antisemita.

Durante los años ´30, a medida que el antisemitismo nazi crecía en Alemania, Pacelli no se quejó ni siquiera en nombre de los judios convertidos al catolicismo: para él, era cuestión de política interna.

En enero de 1937, tres cardenales y dos obispos alemanes viajaron al Vaticano para pedir una vigorosa protesta contra la persecución nazi de la Iglesia Católica, a la que se le habían suprimido todas las formas de actividad con excepción de los servicios religiosos. Finalmente, Pío XII decidió lanzar una encíclica, escrita bajo la dirección de Pacelli, donde no había ninguna condena explícita al antisemitismo.

En el verano de 1938, mientras agonizaba, Pio XII se preocupó por el antisemitismo en Europa y encargó la redacción de otra encíclica dedicada al tema. El texto que nunca vió la luz del día, se descubrió hace poco. Lo escribieron tres jesuitas, pero presumiblemente Pacelli estuvo a cargo del proyecto. Se iba a llamar Humani Generis Unitas (La unión de las raza humana) y, a pesar de sus buenas intenciones, está lleno de una antisemitismo que Pacelli había mostrado en su primer estadía en Alemania. Los Judios, dice el texto, eran responsables de su destino, Dios los había elegido, pero ellos negaron y mataron a Cristo. Y “cegados por su sueño de triunfo mundial y éxito materialista” se merecían “la ruina material y espiritual” que se habían echado sobre sí mismos.

El documento advierte que defender a los judíos como exígen “los principios de humanidad cristianos” podría conllevar el riesgo inaceptable de caer en la trampa de la política secular. La encíclica llegó a los jesuitas de Roma a fines de 1938; hasta el día de hoy, no se sabe por qué no fue elevada a Pío XII, Pacelli, convertido en Papa el 12 de marzo de 1939, sepultó el documento en los archivos secretos y les dijo a los cardenales alemanes que iba a mantener relaciones diplomáticas normales con Hitler.

Pacelli conoció los planes nazis para exterminar a los judíos de Europa en enero de 1942. Las deportaciones a campos de exterminio habían comenzado en diciembre de 1941. A lo largo de 1942, Pacelli recibió información confiable sobre los detalles de la solución final provista por los británicos, franceses y norteamericanos en el Vaticano.

El 17 de marzo de 1942, representantes de las organizaciones judías reunidos en Suiza le enviaron un memorándum a través del nuncio papal en Berna, donde detallaban las violentas medidas antisemitas en Alemania, en sus territorios aliados y en zonas conquistadas. El memo fue excluído de los documentos de la época de la guerra que el Vaticano publicó entre 1965 y 1981.

En septiembre de 1942, el presidente norteamericano Franklin Roosevelt envió a su representante personal, Mylon Taylor, a que le pediera a Pacelli una declaración contra el exterminio de los judíos. Pacelli se negó a hablar porque debía elevarse sobre las partes beligerantes.

El 24 de diciembre de 1942, finalmente, Pacelli habló de “aquellos cientos de miles que, sin culpa propia, a veces sólo por su nacionalidad o raza, reciben la marca de la muerte o la extinción gradual”. Esa fue su denuncia pública mas fuerte de la solución final.

Pero hay algo peor. Luego de la liberación de Roma, Pio XII pronunció su superioridad moral retrospectiva por haber hablado y actuado a favor de los judíos. Ante un grupo de palestinos, dijo el 3 de agosto de 1946:

“Desaprobamos todo uso de fuerza (….) como en el pasado condenamos en varias ocasiones las persecuciones que el fanatismo antisemita infligió al pueblo hebreo”. Su autoexculpación grandilocuente un año después del fin de la guerra demostró que no sólo fue Papa ideal para la solución final nazi, sino que también un hipócrita.


FUENTE: NOTA PUBLICADA EN LA REVISTA “VEINTIDOS” EL DÍA JUEVES 30 DE SEPTIEMBRE DE 1999

domingo, 12 de enero de 2014

La Cábala

Leyendo que algunos cristianos consideran a la cábala como un movimiento válido para la interpretación bíblica, aquí les dejo lo que consiste este grupo judío.


La Cábala

La cábala (del hebreo קַבָּלָה‎ qabbalah, ‘recibir’) es una disciplina y escuela de pensamiento esotérico relacionada con el judaísmo. Utiliza varios métodos más o menos arbitrarios para analizar sentidos recónditos de la Torá (texto sagrado de los judíos, al que los cristianos denominan Pentateuco, y que representa los primeros cinco libros de la Biblia).

En la antigua literatura judaica, la cábala era el cuerpo total de la doctrina recibida, con excepción del Pentateuco. Así pues, incluía a los poetas y los hagiógrafos de las tradiciones orales, incorporadas posteriormente al texto de la Mishná.

Sus textos principales son el Árbol de la Vida, el Talmud de las 10 sefirot, el Zohar, el prefacio de la Sabiduría de la cabalá.

Orígenes


La cábala surgió hacia finales del siglo XII, en el sur de Francia y España. Durante el renacimiento místico judío en la Palestina otomana.

La cábala sale a la luz como tal entre los siglos XII y XIII en la Provenza y Cataluña a través de las comunidades judías de la zona vinculadas indefectiblemente a Oriente Próximo. Así, podemos decir que la cábala nace en Sefarad, la comunidad judía española.

Una importante contribución a la cábala se la debemos a Abraham Abulafia (nacido en Zaragoza en 1240). Una de las fuentes más importantes de la cábala es el Zóhar (‘libro del esplendor’), escrito por Simeón Ben Yojai. La idea básica allí expuesta es que, del seno mismo de la Divinidad Oculta o Infinito (el Ain Sof), surgió un rayo de luz que dio origen a la nada (ain), identificada con una esfera (sefirá) o región, que recibe el nombre de kéter (‘corona’). A partir de esta corona suprema de Dios emanan otras nueve esferas (las sefirot). Estas diez esferas constituyen los distintos aspectos de Dios mediante los cuales este se automanifiesta.

Según el escritor italiano Pico della Mirándola (1463-1494), el filósofo cabalístico alemán Johannes Reuchlin (1455-1522) y el matemático alemán Wilhelm Schickard (1592-1635), la cábala era una sabiduría ancestral anterior a todas las religiones, que el dios Yahvé había revelado primero a Adán (el primer hombre, según la mitología hebrea), después a Abraham y luego a Moisés en el monte Sinaí, al tiempo que le hacía entrega de las Tablas de la Ley, un suceso que los judíos creían real, y situaban alrededor del siglo XIII A.C.

También se pretende que Dios enseñó sus verdades y misterios a través del ángel Raziel tras la caída de Adán.

Explicación de la cábala


La cábala como tal es el pozo de todas las tradiciones místicas judías que se fueron acumulando desde antes de Cristo y que llegaron a reinterpretar las Escrituras de tantas y tan variadas maneras que llegaron a crear una mística cercana al gnosticismo o al jasidismo.

En esencia, la cábala (palabra que significa ‘recibir’) es un sistema de interpretación mística y alegórica de la Torá (que los cristianos llaman Pentateuco, y representa los primeros cinco libros de la Biblia cristiana),1 que busca en ese texto el significado del mundo y la «verdad». Pretende interpretar los sentidos ocultos de los cinco libros y en ellos busca la revelación. Puede entenderse de una manera metafísica, buscando la iluminación, o se puede entender como un medio a través del cual llegar a conocer la realidad que nos rodea. Cabalística es la afirmación de que «el conocimiento absoluto no tiene objeto sino que es un medio». Para los cabalistas, el lenguaje es creador y la Torá contiene todos los textos, todas las combinaciones que pueden darse para crear otros mundos y otras realidades. Los cabalistas entienden que el nombre de Dios está formado por todas las letras que componen el alfabeto y que este, por tanto, tiene múltiples formas. Dios se sirvió de las letras para crear el universo a través de sus emanaciones o sefirot.

De todas formas hay quien dice que existe una cábala cristiana, a lo que otros responden diciendo que lo más cercano al misticismo judío de la cábala es el catarismo.