Los Testigos de Jehová
Hablemos de una de las más conocidas sectas pseudo cristianas, que hacen llamar los Testigos de Jehová.
Cada semana ellos van de casa en casa llevando sus revistas y predicando su falsa doctrina.
Veamos donde nacen, quienes son, que creen y como refutarlos bíblicamente.
Fundador
Su
fundador Charles Taze Russell, nacido en 1852. Era
de origen presbiteriano pero perdió la fe.
Le
llamaron la atención las advertencias sobre el fin del mundo que hacían los
adventistas, por lo que ingresó a sus filas de adeptos.
Junto
con Nelson Barbour imprimió una revista, que hoy conocemos como “La Atalaya”.
Su
fascinación por la profecía lo llevó a creerse él mismo, un gran profeta y a
fundar, en 1879, The Watchtower Bible and Tract Society (La Sociedad Bíblica de
la Atalaya), hoy conocida como “Los
Testigos de Jehová”.
Russell
era un negociante, se hizo famoso por sus falsas curas para el cáncer y su “Trigo Milagroso” el cual vendía a
precios exorbitantes. Esta estafa fue demostrada en el periódico The Brooklyn
Eagle, donde se comprobó la falsedad de sus remedios extraordinarios.
Russell,
sin terminar la escuela secundaria, sin estudiar teología, ni muchos menos
conocer griego ni hebreo, se autodenomina “pastor” y llega a la conclusión de
que todos los cristianos habían interpretado erróneamente la Biblia. Para
remediar la situación escribió 7 volúmenes llamados “Estudios de la Sagradas Escrituras”.
Murio
en 1916.
Historia
El
inicio de esta secta tuvo lugar en 1881 en Pensylvannia, U.S.A. con la
publicación de la revista “Zion’S
Watchtower” (La Atalaya de Sión), luego se trasladarían a Brooklynn, N.Y.
Russell
anunció que la segunda venida de Cristo sería el año 1914. En ese año las
144,000 personas debían ser llevadas al cielo y dar comienzo el milenio.
La
humanidad tendría otra oportunidad de vivir en el paraíso terrenal.
Al
no ocurrir lo que había profetizado, Russell postergó la fecha hasta 1915 y de
nuevo a 1918. Mas tarde, los Testigos reinterpretaron el año 1914 como el “principio de los últimos días”.
Tras
la muerte de Russell se desató una lucha de poder, siendo Joseph Franklin
Rutheford quien tomó la presidencia de los Testigos. También continuó la costumbre
de imponer a sus seguidores nuevas doctrinas bajo el pretexto de que eran “nueva luz” de las Escrituras,
procedente de Jehová.
Hizo
un cambio a la doctrina de Russell, por ejemplo, prohibió la celebración de la
Navidad, de los cumpleaños, enseñó que Cristo no murió en una cruz, sino en un
madero.
En
el año 1918 fue encarcelado por corto tiempo, lo suficiente para salir lleno de
ira contra el clero cristiano al que hacía culpable de sus desgracias.
Fue
él quien les dio a los Testigos su carácter agresivo contra el cristianismo, al
que condenaba regularmente en encendidas prédicas.
En
1931, cambió el nombre de la secta a Testigos de Jehová, separándose de los
seguidores de Russell que no estaban de acuerdo con su doctrina.
Los
Testigos crecieron enormemente durante la presidencia de Rutheford a quien
ellos consideran entre los hombres más iluminados de la historia, no menos que
Jesucristo.
Organización
Su
gobierno es altamente centralizado. Desde su sede de Brooklyn, N.Y., el
presidente de los Testigos y siete directores vitalicios dirigen la
organización mundial con estricta disciplina.
Cada
nación tiene su director general con subdivisiones por provincias, ciudades,
etc.
No
tienen ministros ordenados. En vez de eso, cada Testigo se considera ministro.
Sin embargo, sí tienen un cuerpo de ancianos.
El
tercer presidente, Nathan Knorr, organizó una escuela para misioneros en el
extranjero, llamada “Galaad”.
Los
Testigos se identifican como una sociedad de cristianos dedicados a honrar a
Jehová y a la promoción del estudio de la Biblia. Enseñan que sólo los Testigos
se salvarán porque sólo ellos obedecen totalmente a Jehová.
Exigen
obediencia absoluta a doctrinas y prácticas producidas por sus propios líderes
y que a veces son contrarias a la vocación cristiana. Por ejemplo, a los
matrimonios que trabajan en la sede central se les prohíbe tener hijos mientras
trabajen allí.
Aislamiento progresivo
con el mundo exterior
Los
Testigos de Jehová empiezan por aislar a los miembros de toda relación con
personas e instituciones fuera de la secta, (familiares, amigos, lectura,
tratamiento médico normal) y de la participación responsable en la sociedad.
Se
les prohíbe celebrar Navidad, los cumpleaños, los días de fiesta, votar o
participar en la política, servir en el ejército, saludar a la bandera, etc.
Creen
que toda autoridad fuera de los Testigos viene de Satanás, incluso la autoridad
civil.
Un
Testigo que sea expulsado puede visitar el Salón del Reino pero no puede hablar
con los miembros y nadie puede hablar con él. Todos deben actuar como si éste
ya no existiese aunque sean miembros de su familia.
Alteración de la
conciencia por medio de bombardeo con eslóganes y engaños.
En
un principio le esconden a los nuevos adeptos su rechazo a las verdades
fundamentales del cristianismo.
Su
táctica al principio, es mantener a la persona lo más ocupada y acompañada
posible y no cesar de inculcarle consignas y presionarle para que busque más
adeptos. Tienen cinco reuniones a la semana para instrucción y entrenamiento.
Proselitismo agresivo
Todo
Testigo tiene una cuota de horas que debe dedicar a la propagación de la secta.
Algunos toman sólo trabajos de medio tiempo para dedicar hasta 150 horas
mensuales a las visitas a las casas y centros comerciales.
Todos
los meses, cada grupo debe enviar a la sede de Brooklyn un informe que incluye
nombres e información sobre cada persona visitada.
Publicaciones
Las
revistas “La Atalaya” y ¡Despertad!
Doctrina
En
general son fundamentalistas. Se fundamentan en tres proposiciones:
1.
La Biblia contiene la Palabra de Dios.
2.
Los hombres debemos guiarnos sólo por la Biblia.
3.
La Biblia es entendida sólo por los Testigos.
Los
testigos no se guían verdaderamente por la Biblia, pues, para ajustar la Biblia
a la conveniencia de la secta, el Señor Knorr, tercer presidente de los
Testigos, mandó a un comité anónimo a producir una nueva traducción llamada “La Traducción del Nuevo Mundo”.
Esta
"Biblia" solo la usan los Testigos de Jehová y aquellos que la han adquirido sin conocer sus herejías
encubiertas.
Ellos
cambiado varios versículos de la Biblia para poder adecuarla a sus doctrinas; por
ejemplo, para negar la divinidad de Jesucristo cambiaron Juan 1:1; donde dice “el Verbo era Dios”, ponen “el verbo era un dios”.
Los
Testigos solo usan unos pasajes e ignoran el resto de la Biblia. Interpretan a
su manera su propia Biblia para justificar las doctrinas de sus líderes.
Los
Testigos no reconocen la Trinidad de Dios; ellos afirman que hay un solo Dios
(son monoteístas); pero no reconocen a las tres personas divinas.
Niegan
la persona del Espíritu Santo; en su traducción escriben “espíritu santo” sin
mayúsculas, porque no lo consideran una persona sino sólo una “fuerza”.
Niegan
la divinidad de Jesucristo. Esto lo demuestran claramente en su traducción de la
Biblia: “y la palabra era un dios” (Juan 1,1); lo cual contradice claramente el
texto griego original.
Niegan
que Jesús muriera en una cruz y dicen que fue en un madero. Según ellos, la
cruz es un símbolo pagano que se usaba antes de Cristo e introducido en el
cristianismo a mediados del siglo III DC.
Niegan
la resurrección corporal de Jesucristo. Dicen que Jesús resucitó como espíritu
sin cuerpo. El cuerpo, según ellos, se pudrió en la tumba. Lo que resucitó,
dicen, fue un espíritu angélico.
Niegan
la existencia del infierno. Según los Testigos de Jehová, los condenados sencillamente
cesarán de existir.
Niegan
la inmortalidad del alma.
Creen
que solamente 144,000 personas irán al cielo, los demás quedarán en una tierra
paradisíaca después de que Dios mate a todos lo que no son testigos de Jehová en
Armagedón. Solamente serán salvados los Testigos de Jehová.
Afirman
que en 1914 Cristo vino “invisiblemente”
y los escogió a ellos como su verdadero pueblo, para ser “esclavo fiel y discreto”. Antes habían dicho que había venido en
1874.
Refutación bíblica
Un
punto crítico en su doctrina es en cuanto a la Trinidad: por eso debemos en
primer lugar lo que la Biblia dice en cuanto a ella.
Dios
se revela en la Biblia como una Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu
Santo; tres personas y un solo Dios.
En
el bautismo de Jesús por parte de Juan en Mateo 3:16-17; y en la fórmula
bautismal de la Gran Comisión en Mateo 28:19, entre muchos otros pasajes,
podemos ver esta doctrina.
Por
eso, el Espíritu Santo es la tercera Persona de la Trinidad, y no puede
considerarse como una fuerza, como dicen ellos.
En
cuanto a Cristo Él es quien manifiesta su poder y su gloria divina; por eso
debemos ver toda la Biblia y no interpretar algunos pasajes aisladamente.
A
lo largo de la Biblia podemos ver como se revela la deidad de Jesucristo; Él
fue 100% Dios y 100% hombre.
Conclusión
Los
testigos de Jehová son falsos profetas porque han cambiado su doctrina muchas
veces y han profetizado el fin del mundo para diferentes fechas.
Conversar
con los Testigos de Jehová resulta muy difícil, cambian de un tema a otro con
la intención de confundir, por eso no debemos permitir que esto suceda, debemos
hablar enfocándonos en un sólo tema.
Son
muchos los temas que podemos refutar a los testigos de Jehová, pero lo más
importante es conocer la Palabra de Dios para no dejarnos envolver por ellos.
Que buenos temas!. Estaría muy bien el que hicieras uno de la religion catolica, ya que para la mayoria de las personas, sta religion es la madre de las "rameras"..
ResponderEliminarSaludos.